Los refrigeradores son máquinas muy bien fabricadas que, si bien son exigentes en cuanto al calibre de los sistemas de alimentación, no suelen ser especialmente exigentes en cuanto al mantenimiento, lo que garantiza que son inversiones que perdurarán durante muchos años. Pueden funcionar durante años sin requerir servicios técnicos especializados, lo que supondrá un importante ahorro económico si se conectan a circuitos eléctricos de alta calidad y se confirma que disponen de una excelente ventilación alrededor del equipo.
Frigoríficos de conservación
Limpieza interna.
Periodo: Cada trimestre.
1. Asegúrese de que los estantes internos del frigorífico están impecables y libres de comida podrida o derramada. Normalmente formados por malla metálica, tienen un revestimiento para detener el óxido o la corrosión, lo que es especialmente útil para cuando se derraman líquidos dentro del frigorífico. Para limpiarlos, saque del frigorífico todo lo que pueda obstaculizar la limpieza o vacíe el frigorífico por completo para que ésta pueda realizarse correctamente sin obstrucciones. Para retirar los estantes vacíos del frigorífico, deslícelos hacia delante.
2. Con un paño húmedo, limpie con cuidado las superficies superior e inferior luego de aplicar un detergente ligero. Después de eliminar el agua sobrante con una toalla, deje que la zona se seque y respire. Cuando haya terminado, vuelva a colocar el frigorífico en su sitio.
3. El proceso de limpieza es el mismo si el frigorífico contiene cajones. Retire los cajones de los dispositivos de ajuste después de vaciarlos.
4. Limpie las paredes interiores del frigorífico con un detergente ligero después de retirar los estantes o cajones. Antes de instalar los dispositivos de ajuste interiores, déjelos secar.
5. Con una toalla húmeda, limpie los cajones con un detergente suave. Frote suavemente. Vuelva a fijar los cajones a los herrajes de montaje del frigorífico después de secarlos.
6. Coloque los alimentos en el frigorífico.
Descongelar
Para evitar la formación de hielo, muchos frigoríficos actuales incorporan ciclos automáticos de descongelación del evaporador. Estos ciclos suelen realizarse encendiendo un grupo de calentadores eléctricos, que derriten rápidamente la escarcha existente. Algunos fabricantes prefieren que este ciclo se ejecute manualmente y a discreción del operador del frigorífico. El método sugerido para la descongelación es el siguiente.
1. Compruebe si la escarcha tiene un grosor superior a 8 mm.
2. Retire el contenido de los compartimentos.
3. Corte la corriente del frigorífico.
4. Mantenga la puerta abierta.
5. Si se acumula agua en los compartimentos, retírela. Utilice una esponja o un trozo de tela absorbente.
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En caso de que su frigorífico presente algún problema complejo en el futuro, se le recomienda llamar a un especialista en reparación de refrigeradores.